24 DE MAYO |
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Dferrari |
“Ahí tienes a tu Madre” |
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San Juan 19, 26-27 Jesús, viendo a su Madre y junto a Ella, al discípulo a quien amaba, dice
a su madre: “Mujer, ahí tienes a tu hijo”. Luego dice al discípulo: “Ahí tienes
a tu Madre”. Y desde aquella hora el discípulo la acogió en su casa. |
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REFLEXIÓN DE S.S. BENEDICTO
XVI “María fue elevada en cuerpo y alma a la gloria
del cielo, y con Dios es reina del cielo y de la tierra. ¿Acaso así está alejada
de nosotros? Al contrario. Precisamente al estar con Dios y en Dios, está muy
cerca de cada uno de nosotros. Cuando estaba en la tierra sólo podía estar
cerca de algunas personas. Al estar en Dios, que está cerca de nosotros, más
aún, que está “dentro” de nosotros, María participa de esta cercanía de Dios.
Al estar en Dios y con Dios María está cerca de cada uno de nosotros, conoce
nuestro corazón, puede escuchar nuestras oraciones, puede ayudarnos con su
bondad materna. Nos ha sido dada como “madre” –así lo dijo el Señor-, a la
que podemos dirigirnos en cada momento. Ella nos escucha siempre, siempre
está cerca de nosotros; y, siendo Madre del Hijo, participa del poder del
Hijo, de su bondad. Podemos poner siempre toda nuestra vida en manos de esta Madre,
que siempre está cerca de cada uno de nosotros.” (Homilía. Solemnidad de la Asunción de PETICION DE S.S. BENEDICTO XVI “Demos gracias al Señor por el don de esta Madre
y pidamos a María que nos ayude a encontrar el buen camino cada día.” (Homilía. Solemnidad de la Asunción de |
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HOY PEDIMOS Maria, madre nuestra,
tu que siempre permaneciste fiel a tu Hijo, te pedimos tu ayuda para
permanecer unidos a Cristo, porque separados de El, nada podemos hacer, y
deseamos dar muchos frutos como sus discípulos para la Gloria del Padre.
Amén. Que María viva
en tu corazón Pedro Sergio
Antonio Donoso Brant p.s.donoso@vtr.net |