LA PRESENTACIÓN DE JESÚS EN EL TEMPLO

 

LA PRESENTACION DE JESUS EN EL TEMPLO

 

 

Lc. 2, 22-24

«Y cumplidos los días de la purificación, llevaron a Jesús a Jerusalén para presentarlo al Señor, y para presentar como ofrenda un par de tórtolas o dos pichones, según lo mandado en la Ley del Señor».

 

 

REFLEXIÓN DE JUAN XXIII

La vida de Jesús, todavía en los brazos maternos, se abre al contacto de los dos Testamentos, Luz y revelación de las gentes, esplendor del pueblo elegido. San José debe estar presente y participar también en el rito de las ofrendas legalmente prescritas.

Aquel episodio se perpetúa en la Iglesia; y en el acto de repetir el Avemaría, es grato observar las hermosísimas esperanzas del continuo reflorecimiento de las promesas del sacerdocio y de los cooperadores y de las cooperadoras en gran número del Reino de Dios: jóvenes alumnos de los seminarios, de las casas religiosas, de los estudiantes misioneros, incluso de las universidades católicas y de otras formas de un futuro apostolado seglar cuya expansión, a pesar de las dificultades y de las oposiciones de la hora presente e incluso en diversas naciones muy atribuladas por la persecución, no cesan de ser espectáculo consolador hasta el punto de arrancar palabras de admiración y de alegría...

 

 

 

Que María viva en tu corazón

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

www.caminando-con-maria.org

p.s.donoso@vtr.net    

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