NUESTRA SEÑORA DE SUYAPA

PATRONA DE HONDURAS

 

 

La Virgen María invocada como Nuestra Señora de Suyapa (Honduras)

La diminuta imagen de Nuestra Señora de la Concepción de Suyapa fue hallada un sábado del mes de febrero de 1743, por Alejandro Colindres, un joven y humilde labrador y por un niño de ocho años llamado Jorge Martínez, quienes regresaban a la aldea de Suyapa, cansados de trabajar todo el día en la cosecha del maíz.

Ya llevaban la mitad de la jornada cuando les anocheció. Habían llegado a la quebrada del Piligüín un buen lugar para pernoctar. Allí se acostaron en el duro suelo. Enseguida Alejandro sintió que un objeto, al parecer una piedra, le impedía acomodar la espalda. A oscuras lo tomó del suelo y lo arrojó lejos.

Curiosamente al recostarse nuevamente sintió aquella molestia en el mismo lugar y esta vez no lo tiró sino que, intrigado por lo acontecido, lo guardó en su mochila. A la luz del amanecer descubrió sorprendido que el misterioso objeto era una pequeña imagen de Nuestra Señora tallada en madera de cedro.

Nuestra Señora de Suyapa mide apenas seis centímetros y medio; obra muy antigua posiblemente trabajada con devoción por algún artista aficionado. En su mirada angelical se refleja la nobleza de la raza indígena. Es morena, de rostro ovalado, mejillas redondeadas, y su lacia cabellera le llega hasta los hombros. La imagencita tiene sus diminutas manos unidas en actitud de oración. El color original de su vestidura es el rosa pálido, que apenas se deja ver por estar totalmente cubierto por un manto oscuro tachonado de estrellas doradas y adornado con valiosas alhajas. Colocado al frente de la imagen, un resplandor de plata sobredorada la enmarca. Es una cosa peculiar, pues tanto el resplandor, como la aureola, suelen verse habitualmente en el respaldo de las imágenes. El resplandor está formado por dos aros cerrados en forma de número ocho del que salen los rayos que rodean a la Virgen. El aro superior está nimbado por doce estrellas de plata. El conjunto nos recuerda a la mujer vestida de sol que aparece en el Apocalipsis. De plata sólida es la esfera que sirve de apoyo a la imagen que tanto venera el pueblo hondureño.

En 1925 Pío XII declaró a Nuestra Señora de Suyapa Patrona de la República de Honduras, y se escogió el 3 de febrero como el día de la celebración patronal, con misa y oficio propios.

El primer milagro notable, atestiguado notarialmente, ocurrió en el año de 1796. La primera ermita se bendijo en el 1780 y el templo actual, de enormes proporciones, capaz de albergar a las multitudes que peregrinan a Suyapa, recibió la visita de Juan Pablo II en 1983. El Santuario de Santa María de Suyapa se encuentra enclavado en una de las zonas más humildes de la ciudad y la Basílica puede divisarse desde casi cualquier lugar de la misma.

 


 

En 1943, el administrador apostólico del arzobispado de Tegucigalpa monseñor Emilio Morales Roque acordó, dispuso y mandó que se construyera el nuevo Santuario Nacional para la Patrona de Honduras integrando una junta pro construcción

A este hermoso templo llegó el 8 de marzo de 1983 su santidad Juan Pablo II para rendir su tributo y devoción a la madre de Jesucristo oficiando una misa concelebrada con el arzobispo capitalino monseñor Héctor Enrique Santos y el obispo auxiliar monseñor Oscar A. Rodríguez hoy cardenal de la Iglesia Católica y titular de la Arquidiócesis de Tegucigalpa.

La Virgen de Suyapa es el símbolo de fe de los católicos hondureños y de muchos extranjeros que por esta época viajan a Tegucigalpa para visitar a la patrona de los hondureños que en 1969 fue declarada capitana de las Fuerzas Armadas de Honduras.

         

 Plegarias a la Virgen de Suyapa
(Patrona de Honduras María)


¡Oh! Santísima Virgen de Suyapa,
toda hermosa, bella y dulce,
concebida sin pecado,
ruega por nosotros que acudimos a .

 

Rezar Un Ave María (Dios te salve María…)

 

¡Oh! Santísima Virgen de Suyapa,
exenta del pecado original,
llena de gracia desde el primer instante,
de Tu Purísima concepción,
ruega por nosotros que acudimos a Ti.

 

Rezar Un Ave María (Dios te salve María…)

 

¡Oh! Santísima Virgen de Suyapa,
protectora y abogada nuestra,
honra de nuestro pueblo
y patrona de Honduras
ruega por nosotros que acudimos a Ti.

 

Rezar Un Ave María (Dios te salve María…)

ORACIÓN

Virgencita de Suyapa,
Madre de mi corazón,
únete siempre a mi espalda
como al niño que te halló,
guíame por el camino,
abrígame con tu amor,
condúceme al paraíso
donde no se oculta el Sol.

Cuando me venza el cansancio,
o me atenace la angustia,
cuando la muerte, a su paso,
haga despertar mis dudas,
Virgencita de Suyapa
ven a mi espalda en ayuda,
sostenme con tu mirada,
y mis lágrimas enjuga.

Reina de los hondureños,
con tus pequeñas manitas
rezas por el bien del pueblo
que en tu protección confía.
Virgencita de Suyapa,
morena de raza indígena,
¡cúbreme de paz el alma
hasta el final de mis días!

Amén.

 

 

Preparado gracias a la indicación de Aida Minence de Honduras

Mas información en el sitio siguiente:

http://www.virgendesuyapa.hn/

 

 

 

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

www.caminando-con-maria.org

www.caminando-con-jesus.org

 

caminandoconjesus@vtr.net