CUBA La tradición
cuenta que en los primeros años del siglo XVII, dos indígenas y un niño negro
esclavo de aproximadamente diez años, salieron en busca de sal desde Barajagua a la bahía de Nipe. Los dos indígenas
se llamaban Juan de Hoyos y Rodrigo de Hoyos y el niño, Juan Moreno, se los
recuerda como "los tres Juanes" Estas tres
personas que trataban de encontrar sal, sólo pudieron llegar hasta la mitad
de la Bahía de Nipe, a Cayo Francés, donde
acamparon para refugiarse de una tormenta que se avecinaba. Pasado el
temporal, reanudaron su viaje rumbo a las salinas de En el año 1687,
el último testigo presencial, Juan Moreno de 85 años de edad, daba testimonio
de dicho acontecimiento así: "...Estando
una mañana la mar en calma salieron de dicho cayo francés para la dicha
salida antes de salir el sol, los dichos Juan y Rodrigo Hoyos y este
declarante. Embarcados en una canoa y apartados de dicho cayo francés vieron
una cosa blanca sobre la espuma del agua, que no distinguieron lo que podría
ser, y acercándose más les pareció un pájaro y ramas secas. Dijeron dichos
indios, parece una niña, y en estos discursos, llegados, reconocieron y
vieron la imagen de Nuestra Señora Después los tres
volvieron a Barajagua y la estatua de la Virgen fue
instalada en una ermita del lugar, pero la imagen desapareció una noche y
reapareció en la mañana, el hecho se repitió dos o tres veces más, hasta que
los pobladores pensaron que la Virgen quería cambiar de lugar y fue colocada
en el altar mayor de la iglesia parroquial, en donde estuvo unos tres años,
pero también de allí desaparecía en algunas ocasiones. Cierto día una
niña, llamada Apolonia, subió hasta el cerro de las minas de cobre donde
trabajaba su madre y vio la imagen de la Virgen de la Caridad en A petición de los
veteranos de la guerra de Independencia fue declarada patrona de Cuba por Su
Santidad Benedicto XV en 1916 y se fijó su festividad para el 8 de
Septiembre. Durante más de
tres siglos la imagen de la Virgen ha permanecido en su Santuario del Cobre,
con los años se comenzó a construir un templo de mayor tamaño, que fue
inaugurado solemnemente el día 8 de Septiembre de 1927. En 1977, el Papa
Pablo VI lo elevó a la categoría de Basílica.
FUENTE: EWTN |
Pedro Sergio Antonio
Donoso Brant |