Caminando con Maria

Pedro Sergio Antonio Donoso Brant

www.caminando-con-maria.org

 

NUEVE DIAS A MARIA INMACULADA

DIA QUINTO

MADRE NUESTRA. CONFIANZA FILIAL

 

Unos treinta tres años después de la visita del Arcángel a nuestra Señora en nazareth, Jesús, su Hijo, está clavado en la cruz. Junto a Él, María, su Madre, San Juan, el discípulo amado y unas santas mujeres.

Jesús les dirige esas palabras que tanta trascendencia ha tenido y van a tener en la vida personal de cada uno de nosotros, de cada hombre: Mujer, le dice a la Virgen, he ahí a tu hijo; luego dice al discípulo: he ahí a tu Madre (Jn 19, 27).

Jesús nos mira a cada uno: He ahí a tu Madre, nos dice. Juan la acogió con cariño y cuidó de Ella con extremada delicadeza hasta el momento en que fue asunta a los cielos en cuerpo y alma.

Propósitos para este día:

1- Nos da una profunda alegría saber que María es nuestra Madre y que está muy cerca de nosotros en todos nuestros caminos. El Señor desea que te sientas hijo suyo, que la quieras porque es la persona más fácil de querer; que tengas con ella detalles de delicadeza y de amor, quizá pequeños pero concretos: jaculatorias, mirar con frecuencia sus imágenes, desagraviarla por el olvido en que la tienen algunos cristianos, acudir a Ella en cualquier necesidad; tenerla presente a lo largo del día: al a hora del Ángelus, en el rezo del Rosario...

Para tratarla tenemos ya un modelo: La relación de cada uno de nosotros con nuestra propia madre, puede servirnos de modelo para nuestro trato con María.

 Fuentes: iglesia.org

Caminando con Maria

volver a inicio                                                                   ir dia siguiente